Disfruté mucho el tiempo que compartí trabajando en la Fundación y siempre guardaré las experiencias que he ganado. Valoro las oportunidades únicas que la FLH me dio. Durante mi pasantía he participado en una variedad de talleres sobre Derechos Humanos y genocidios; he visitado colegios locales y he aprendido sobre los lugares significativos de la historia de los DDHH en Argentina.

En el día a día, trataba con muchas fichas del Centro de Documentación para traducir, y promovía mi conocimiento de estos temas. En la oficina hay un ambiente muy relajado y amable, y todo el mundo me hace sentir muy bienvenida. Además, la fundación me recomendó muchas lugares de importancia histórica y cultural para complementar lo que aprendí en la oficina. Aprecio experimentar una cultura diferente y me gustaría agradecerles por enseñarme sobre todas las cosas argentinas (¡sobre todo voy a echar de menos los alfajores y el mate!).

A nivel personal, este pasantía me permitió tener más confianza para aprovechar oportunidades desafiantes. He desarrollado mis intereses y tengo un idea más clara de lo que quiere hacer en el futuro. Me interesa mucho el trabajo cotidiano de un organización de Derechos Humanos y valoro la oportunidad de aprender sobre lo que trabaja y los objetivos ideológicos que proponen mayor conocimiento y conciencia.

Finalmente, quiero agradecer a todos por apoyarme y por aguantarme mientras mejoraba mi español lentamente. Pasé ocho semanas increíbles y recomendaría esta pasantía a cualquier persona que quiera desafiarse y aprender más sobre una nueva cultura y el tema de los Derechos Humanos.